Mejillones en escabeche

Mejillones en escabeche

Mejillones en Escabeche: Un Clásico que Brilla en la Mesa Navideña

En Navidad, la mesa se viste de gala y no hay mejor forma de sorprender a los tuyos que con una receta tradicional y sabrosa como los mejillones en escabeche. Este plato, que se puede disfrutar frío o templado, se convierte en una opción perfecta para los aperitivos navideños. Su sabor intenso y su textura jugosa hacen de él un manjar que destaca en cualquier reunión familiar. Además, es una preparación que se puede realizar con antelación, permitiéndote dedicar más tiempo a disfrutar con tus seres queridos. ¡Manos a la obra!

 

Consejos adicionales:

  • Variedad de pimentón: Prueba a mezclar pimentón dulce y picante para darles un toque más atrevido.
  • Tiempo de reposo: Si puedes dejarlos reposar 48 horas en la nevera, el sabor será aún más intenso y delicioso.
  • Conservación: Los mejillones en escabeche se pueden conservar en la nevera durante una semana sin problema si están bien cubiertos de escabeche.

Con esta versión navideña de los mejillones en escabeche, tu mesa brillará con un toque de tradición y sabor. ¡Anímate a prepararlos y disfruta de los elogios de tus invitados!

cómo preparar mejillones en escabeche

 

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INGREDIENTES

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PREPARACIÓN

INGREDIENTESINGREDIENTES

INGREDIENTESPREPARACIÓN

1. Limpieza de los mejillones

  1. Limpia bien los mejillones bajo agua fría corriente.
  2. Retira las “barbas” con la ayuda de un cuchillo pequeño o tirando de ellas con los dedos.
  3. Raspa la concha para eliminar las impurezas y asegúrate de que todos estén bien limpios.

2. Cocción de los mejillones

  1. Coloca los mejillones en una olla con tapa.
  2. Añade un chorrito de agua (no hace falta mucha, con 50 ml es suficiente).
  3. Incorpora el limón cortado en trozos, 2 dientes de ajo (aplastados pero con piel), las 2 hojas de laurel, los granos de pimienta y un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
  4. Tapa la olla y pon el fuego a temperatura alta.
  5. Cocina hasta que los mejillones se abran (esto suele tardar entre 3 y 5 minutos).
  6. Retira del fuego y separa la carne de los mejillones de sus cáscaras.
  7. Filtra el caldo de cocción con un colador fino o una tela de cocina para eliminar impurezas y resérvalo.

3. Preparación del escabeche

  1. En una sartén o cacerola, vierte un buen chorro de aceite de oliva virgen extra y caliéntalo a fuego bajo.
  2. Añade los 2 dientes de ajo restantes (aplastados pero con piel) y las hojas de laurel.
  3. Cocina a fuego suave hasta que los ajos empiecen a dorarse ligeramente, pero sin quemarse (aproximadamente 3-4 minutos).
  4. Retira la cacerola del fuego y añade la cucharadita de pimentón. Remueve rápidamente con una cuchara de madera para que el pimentón no se queme.
  5. Incorpora el caldo de la cocción de los mejillones, el vino blanco y el vinagre de vino reserva.
  6. Sazona con una pizca de sal (prueba antes, ya que el caldo de los mejillones puede ser suficiente).
  7. Vuelve a poner la olla a fuego medio-alto y cocina durante 3-4 minutos más desde que empiece a hervir. Este paso es crucial para que se integren bien los sabores.

4. Montaje final

  1. Coloca los mejillones (sin cáscara) en un recipiente hondo de vidrio o cerámica.
  2. Vierte el escabeche caliente por encima, asegurándote de que los mejillones queden completamente cubiertos por el líquido.
  3. Deja enfriar a temperatura ambiente antes de tapar el recipiente.
  4. Refrigera durante al menos 24 horas para que los mejillones absorban todo el sabor del escabeche. Cuanto más tiempo reposen, más sabrosos estarán.

5. Presentación

  1. Sirve los mejillones fríos o a temperatura ambiente en una fuente elegante.
  2. Acompáñalos con rebanadas de pan crujiente o una buena hogaza casera.

1. Limpieza de los mejillones

  1. Limpia bien los mejillones bajo agua fría corriente.
  2. Retira las “barbas” con la ayuda de un cuchillo pequeño o tirando de ellas con los dedos.
  3. Raspa la concha para eliminar las impurezas y asegúrate de que todos estén bien limpios.

2. Cocción de los mejillones

  1. Coloca los mejillones en una olla con tapa.
  2. Añade un chorrito de agua (no hace falta mucha, con 50 ml es suficiente).
  3. Incorpora el limón cortado en trozos, 2 dientes de ajo (aplastados pero con piel), las 2 hojas de laurel, los granos de pimienta y un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
  4. Tapa la olla y pon el fuego a temperatura alta.
  5. Cocina hasta que los mejillones se abran (esto suele tardar entre 3 y 5 minutos).
  6. Retira del fuego y separa la carne de los mejillones de sus cáscaras.
  7. Filtra el caldo de cocción con un colador fino o una tela de cocina para eliminar impurezas y resérvalo.

3. Preparación del escabeche

  1. En una sartén o cacerola, vierte un buen chorro de aceite de oliva virgen extra y caliéntalo a fuego bajo.
  2. Añade los 2 dientes de ajo restantes (aplastados pero con piel) y las hojas de laurel.
  3. Cocina a fuego suave hasta que los ajos empiecen a dorarse ligeramente, pero sin quemarse (aproximadamente 3-4 minutos).
  4. Retira la cacerola del fuego y añade la cucharadita de pimentón. Remueve rápidamente con una cuchara de madera para que el pimentón no se queme.
  5. Incorpora el caldo de la cocción de los mejillones, el vino blanco y el vinagre de vino reserva.
  6. Sazona con una pizca de sal (prueba antes, ya que el caldo de los mejillones puede ser suficiente).
  7. Vuelve a poner la olla a fuego medio-alto y cocina durante 3-4 minutos más desde que empiece a hervir. Este paso es crucial para que se integren bien los sabores.

4. Montaje final

  1. Coloca los mejillones (sin cáscara) en un recipiente hondo de vidrio o cerámica.
  2. Vierte el escabeche caliente por encima, asegurándote de que los mejillones queden completamente cubiertos por el líquido.
  3. Deja enfriar a temperatura ambiente antes de tapar el recipiente.
  4. Refrigera durante al menos 24 horas para que los mejillones absorban todo el sabor del escabeche. Cuanto más tiempo reposen, más sabrosos estarán.

5. Presentación

  1. Sirve los mejillones fríos o a temperatura ambiente en una fuente elegante.
  2. Acompáñalos con rebanadas de pan crujiente o una buena hogaza casera.

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