ACEITEROS DEL SUR RESPONSABILIDAD SOCIAL

Pechugas de pollo a la naranja con piña y pimiento

Por todos es conocido que la carne de pollo combina estupendamente con los alimentos en los que se conjugan sabores ácidos y dulces como son los cítricos o la piña, y posiblemente uno de los mejores ejemplos de ello es esta estupenda pechuga de pollo a la naranja con piña y pimiento. Absolutamente deliciosa.

INGREDIENTES

500 grs de pechuga de pollo

Para macerar el pollo:

Zumo de 1 limón
Zumo de 2 naranjas
2 cucharadas de salsa de soja
3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra Picual

Para la salsa:

8 rodajas de piña en su jugo
1 pimiento rojo
1 guindilla
El jugo de la maceración
El jugo de la piña
2 cucharadas de salsa de soja
1 cucharada de miel
2 cucharadas de kétchup
1 cucharadas de harina de maíz
1 cucharada de azúcar moreno
1 cucharadita de salsa inglesa
150 ml de caldo de carne
1 pellizco de sal

Para el rebozado:

1 huevo
2 cucharadas de harina de maíz
2 cucharadas de harina de trigo
1 cucharadita de levadura en polvo
50 ml de agua
Sal
Aceite de oliva suave

PREPARACIÓN

Empezamos cortando la pechuga de pollo en filetes y reservamos.
Cortamos las rodajas de piña en trocitos. Reservamos.
Seguidamente, hacemos el macerado mezclando en un cuenco el zumo de naranja, el zumo de limón, 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra Picual con la salsa de soja e introducimos en ello los filetes de pollo, lo movemos bien para que se impregnen del macerado y los guardamos en el frigorífico para que reposen entre media y una hora.
Pasado ese tiempo, escurrimos bien los filetes de pollo con ayuda de un colador y reservamos. Guardamos el jugo de la maceración en el cuenco.
A continuación, vamos a preparar la masa para rebozar el pollo. En otro cuenco amplio ponemos el huevo junto con la harina de trigo, la harina de maíz, la cucharadita de levadura en polvo, unos 50 ml de agua y una pizca de sal, lo removemos muy bien para que se mezcle y nos quede una masa fluida y sin grumos.
Introducimos en esa mezcla los filetes de pollo que teníamos reservados y los removemos para asegurarnos de que queden bien impregnados por la masa de rebozado. Los guardamos en el frigorífico durante unos 15 o 20 minutos.
Mientras, vamos a ir preparando la salsa. Ponemos un cazo al fuego y vertemos en él el jugo de la maceración, la salsa de soja, el jugo de la piña, la miel, el kétchup, el azúcar moreno, el caldo de carne, la salsa inglesa y la sal. Lo llevamos a fuego medio y cuando empiece a hervir bajamos el fuego y lo dejamos cocinando durante unos 5 minutos.
Por último, añadimos la harina de maíz disuelta en un poco de agua, le damos unas vueltas y que se cocine durante otros 3 minutos hasta que espese. Retiramos y reservamos.
Llegados a este punto nos ponemos a freír los filetes de pollo en una sartén con aceite de oliva suave bien caliente hasta que estén bien dorados por ambas caras. Los sacamos y colocamos en un plato sobre papel de cocina absorbente y reservamos.
En esa misma sartén retirando gran parte del aceite salteamos los trozos de piña junto con la guindilla picada muy menuda y el pimiento rojo a trozos con una pizca de sal y sin parar de remover.
Cuando esté dorada la piña y el pimiento comience a ablandarse, añadimos la salsa y mezclamos. Añadimos los filetes de pollo, removemos y cuando empiece a hervir lo retiramos pudiendo servir ya nuestras pechugas de pollo a la naranja con piña y pimiento.

500 grs de pechuga de pollo

Para macerar el pollo:

Zumo de 1 limón
Zumo de 2 naranjas
2 cucharadas de salsa de soja
3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra Picual

Para la salsa:

8 rodajas de piña en su jugo
1 pimiento rojo
1 guindilla
El jugo de la maceración
El jugo de la piña
2 cucharadas de salsa de soja
1 cucharada de miel
2 cucharadas de kétchup
1 cucharadas de harina de maíz
1 cucharada de azúcar moreno
1 cucharadita de salsa inglesa
150 ml de caldo de carne
1 pellizco de sal

Para el rebozado:

1 huevo
2 cucharadas de harina de maíz
2 cucharadas de harina de trigo
1 cucharadita de levadura en polvo
50 ml de agua
Sal
Aceite de oliva suave

Empezamos cortando la pechuga de pollo en filetes y reservamos.
Cortamos las rodajas de piña en trocitos. Reservamos.
Seguidamente, hacemos el macerado mezclando en un cuenco el zumo de naranja, el zumo de limón, 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra Picual con la salsa de soja e introducimos en ello los filetes de pollo, lo movemos bien para que se impregnen del macerado y los guardamos en el frigorífico para que reposen entre media y una hora.
Pasado ese tiempo, escurrimos bien los filetes de pollo con ayuda de un colador y reservamos. Guardamos el jugo de la maceración en el cuenco.
A continuación, vamos a preparar la masa para rebozar el pollo. En otro cuenco amplio ponemos el huevo junto con la harina de trigo, la harina de maíz, la cucharadita de levadura en polvo, unos 50 ml de agua y una pizca de sal, lo removemos muy bien para que se mezcle y nos quede una masa fluida y sin grumos.
Introducimos en esa mezcla los filetes de pollo que teníamos reservados y los removemos para asegurarnos de que queden bien impregnados por la masa de rebozado. Los guardamos en el frigorífico durante unos 15 o 20 minutos.
Mientras, vamos a ir preparando la salsa. Ponemos un cazo al fuego y vertemos en él el jugo de la maceración, la salsa de soja, el jugo de la piña, la miel, el kétchup, el azúcar moreno, el caldo de carne, la salsa inglesa y la sal. Lo llevamos a fuego medio y cuando empiece a hervir bajamos el fuego y lo dejamos cocinando durante unos 5 minutos.
Por último, añadimos la harina de maíz disuelta en un poco de agua, le damos unas vueltas y que se cocine durante otros 3 minutos hasta que espese. Retiramos y reservamos.
Llegados a este punto nos ponemos a freír los filetes de pollo en una sartén con aceite de oliva suave bien caliente hasta que estén bien dorados por ambas caras. Los sacamos y colocamos en un plato sobre papel de cocina absorbente y reservamos.
En esa misma sartén retirando gran parte del aceite salteamos los trozos de piña junto con la guindilla picada muy menuda y el pimiento rojo a trozos con una pizca de sal y sin parar de remover.
Cuando esté dorada la piña y el pimiento comience a ablandarse, añadimos la salsa y mezclamos. Añadimos los filetes de pollo, removemos y cuando empiece a hervir lo retiramos pudiendo servir ya nuestras pechugas de pollo a la naranja con piña y pimiento.

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Pechugas de pollo a la naranja con piña y pimiento

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